El sábado el calor se hizo notar. Para nosotros y para los rivales.
Nosotros entramos con el historial a favor, tranquilos por ganar, sin desesperar, ellos entraron midiéndonos y con las piernas jóvenes.
El primer tiempo se desarrolló tranquilo con situaciones para ambos, pero mejor para ellos. EL siete titular nuestro fue el mismo que derrotó a Pachuca, luego vinieron los cambios por las altas temperaturas.
El segundo tiempo comenzó sin modificaciones notorias en el transcurso del juego, ellos llegaban más, nosotros recuperábamos y el Gabi no podía superar sus marcas.
Trás una muy buena jugada ellos se ponen en ventaja, nosotros nos desesperamos y salimos a buscar. El empate lo encontramos en una jugada NANA marca registrada; un lateral al área y el Negro de hombro la metió.
No quedaba mucho, solo correr un poco más, aguantar el calor y la velocidad de ellos y esperar por el pitazo final. No quedó mucho, solo un rato de diversión.
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